El edificio más alto de Nueva York es sin duda el Empire State Building. Con una altura total de 443,2 metros, este rascacielos ubicado en Midtown Manhattan es uno de los iconos más reconocidos de la ciudad de Nueva York y una de las atracciones turísticas más populares en todo el mundo.
Historia
El Empire State Building fue construido en la década de 1930 en plena Gran Depresión. La construcción del edificio fue una iniciativa del empresario John J. Raskob y del arquitecto William F. Lamb, quienes querían crear un edificio que superara en altura al edificio Chrysler, que en ese momento era el edificio más alto del mundo.
La construcción del Empire State Building comenzó en 1930 y se completó en tan solo 13 meses, un tiempo récord considerando la complejidad del proyecto. Durante la construcción, se utilizó una técnica innovadora de montaje de acero que permitió acelerar el proceso y reducir los costos.
Características
El Empire State Building cuenta con un total de 102 pisos y una altura de 443,2 metros. En su momento de inauguración, en 1931, fue el edificio más alto del mundo, título que mantuvo durante 40 años hasta la construcción de las Torres Gemelas en 1971.
El Empire State Building es también uno de los edificios más eficientes energéticamente de Nueva York, gracias a la implementación de tecnologías innovadoras como la iluminación LED y la gestión inteligente de la energía.
Visitas
El Empire State Building recibe cada año a millones de turistas que quieren disfrutar de las impresionantes vistas panorámicas de la ciudad desde su mirador. El mirador, ubicado en el piso 86, ofrece vistas de 360 grados de la ciudad de Nueva York y sus alrededores.
Los visitantes pueden acceder al mirador del Empire State Building a través de los ascensores más rápidos de Nueva York, que alcanzan una velocidad de 37 km/h.
Conclusion
El Empire State Building es sin duda uno de los edificios más icónicos y reconocidos del mundo. Con su altura impresionante y su diseño innovador, este rascacielos ha sido un símbolo de la ciudad de Nueva York durante décadas y una de las atracciones turísticas más populares en todo el mundo.
